El 30 de junio de 1960, Bélgica concede al Congo su independencia, bajo una pequeña condición, el Congo heredará la deuda externa de Bélgica, con lo cual este joven país nace endeudado y teniendo que devolver un préstamo que jamás recibió, lo cual lo hunde desde su inicio en una crisis económica.
Patrice Émery Lumumba, líder anticolonialista y nacionalista, se convierte en el primer Primer Ministro del Congo independiente, aunque su camino fue desde lo tortuoso hasta lo trágico.
Patrice Émery Lumumba, líder anticolonialista y nacionalista, se convierte en el primer Primer Ministro del Congo independiente, aunque su camino fue desde lo tortuoso hasta lo trágico.
Al poco tiempo de su asunción, la provincia de Katanga, dirigida por Moïse Kapenda Tschombe, declara su independencia, con el apoyo de Bélgica, interesada en sus ricos yacimientos mineros. A pesar de la intervención de Naciones Unidas, y la negativa norteamericana y belga, Lumumba obtiene apoyo de la URSS, y el conflicto se recrudeció, llevando al país al borde de una guerra civil.
En septiembre de 1960, Joseph Kasa-Vubu destituye a Lumumba y a los ministros nacionalistas en un acto de dudosa legalidad. Por negarse a entregar su cargo, Lumumba es puesto bajo arresto domiciliario, y tropas de la ONU se encargan de "protegerlo". Finalmente, tras un golpe de Estado apoyado por el presidente Kasa-Vubu, el coronel Joseph Désiré Mobutu toma el poder. En diciembre de ese mismo año, Lumumba se escapa de la capital para intentar tomar Stanleyville, región donde cuenta con numerosos seguidores. Sin embargo, los esbirros de Mobutu le siguen la pista y la ONU se niega a darle "nueva protección" por haberse evadido anteriormente de ella.
Mientras tanto la CIA había encontrado la solución a tanto conflicto y ordenaba su asesinato para favorecer los intereses de las multinacionales estadounidenses.
Lumumba es arrestado y entregado a las autoridades locales. Será ejecutado esa misma tarde en presencia de Tshombe, Munongo, Kimba, dirigentes del Estado de Katanga y agentes de espionaje belgas y norteamericanos. Al día siguiente, se hacen desaparecer los restos de las víctimas. Varios de sus seguidores serán ejecutados en los días que siguen, al parecer con la participación de militares o mercenarios belgas.
A partir de allí todos los gobiernos congoleños fueron de facto, recién en el 2006 volvió a tener un presidente democrático, recién en el 2006, Lumumba pudo ver el fruto de su larga lucha.
"El árbol donde Lumumba fue atado y fusilado sigue estando en el bosque de Mwadingusha. Acribillado a balazos, como él, sigue estando"
Eduardo Galeano
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